Cada año abrimos las puertas de nuestra finca para vivir una experiencia única: nuestro campamento de verano. Una semana pensada especialmente para los hijos de nuestros colaboradores, donde la diversión se mezcla con el aprendizaje y la magia de compartir en familia.

El objetivo es que los niños conozcan de cerca el trabajo de sus padres y se sientan parte de este gran proyecto. Durante la semana se convierten en pequeños agricultores: siembran, cosechan, lavan gavetas, etiquetan y hasta arman pedidos básicos. Todo en un ambiente seguro, alegre y lleno de curiosidad.

Pero no todo es trabajo: también disfrutan de juegos, actividades lúdicas y mucho tiempo para hacer nuevos amigos, creando recuerdos que atesorarán toda la vida.

Para nuestros colaboradores, este campamento significa más que una semana de actividades: es la oportunidad de compartir momentos inolvidables con sus hijos, de mostrarles con orgullo lo que hacen cada día y de fortalecer la unión familiar.

Con cada edición reforzamos nuestra convicción de que este campamento no solo es una tradición, sino un espacio donde se forjan amistades duraderas y se cultiva el orgullo de pertenecer a una hermosa empresa que sigue sembrando el progreso en Ecuador.